viernes, 23 de abril de 2010

Capítulo 7 de "Rayuela" de Julio Cortázar


Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.

domingo, 11 de abril de 2010

La piratería amenaza el negocio del e-book


Tomado de Público.es
La Federación de Gremios de Editores de España teme más a la piratería de libros electrónicos que a la crisis económica. Su director ejecutivo, Antonio María Ávila, manifestó ayer que, en 2009, "la industria perdió 150 millones de euros" por la descarga gratuita de e-books con copyright. 50 millones más que las pérdidas producidas por las fotocopias. También señaló que la Coalición de Contenidos Culturales y el Centro Español de Derechos Reprográficos (CEDRO) ya habían localizado "hasta 200 páginas web que piratean con libros".

Estos datos forman parte de un informe que ha elaborado la Federación de Editores y que será presentado "en dos o tres meses", según Ávila. En él se analiza la incidencia de la piratería en la industria editorial española. Se ha elaborado a partir de técnicas de muestreo, "sobre todo entre la gente joven", y con una metodología "similar a la utilizada enotros países", añadió el director ejecutivo.

Ávila no reveló, por otra parte, si las pérdidas provienen en su mayor parte del pirateo de e-books académicos y científicos o de e-books de literatura, de los que apenas hay oferta de títulos para los lectores (según los últimos datos, su cuota de facturación sólo llega al 1,33% del mercado). "Lo sabremos cuando se haga público el informe", apuntó.

Amenaza de los piratas
Esta información salió ayer a la luz tras una reunión entre la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, y los diferentes gremios de editores de España. En ella se habló de piratería de e-books. González-Sinde fue tajante en su discurso ante la prensa: "Hay una amenaza de las descargas no remuneradas".

Sin embargo, no toda la cadena del mundo del libro parece estar de acuerdo con esta afirmación y ni siquiera con los datos de pérdidas esgrimidos por el director de la federación de editores. Así, según manifiesta a Público Elena Ramirez, editora de Seix Barral, "las pérdidas por piratería hoy en día son cero. Yo no he constatado nada, y además, al no haber todavía soportes ni plataformas de distribución, no es posible controlar si hay o no pérdidas por piratería". Además, ella sí indica que en los libros de referencia debe haber afectado: "Para mí [como editora de narrativa] estas cifras son irrelevantes". También asegura que durante los diez años que lleva en su cargo han sido muy pocas veces las que ha tenido que echar mano de abogados para cerrar un enlace que distribuía sus libros.

Desde la pequeña editorial Periférica, Julián Rodríguez tampoco cree que la piratería haya dañado su negocio. "Nosotros hemos constatado algo con los libros de Fogwill, pero ha sido sobre todo en Latinoamérica. Y es una zona que, por su situación económica, ya tenía bastante piratería en papel. Es una traslación a otro soporte. Pero, en general, las medianas y pequeñas editoriales no estamos sufriendo daños por el pirateo", afirma.

Desde otros ámbitos como el de los escritores e incluso los libreros, la apreciación que se tiene de la piratería también se muestra alejada de la contundencia de la Ministra de Cultura y la Federación de Gremios de Editores. Así, según la escritora Care Santos, que ha participado en el Grupo de Trabajo sobre el Libro Electrónico del Ministerio, "los datos parecen un poco ficticios. El mercado editorial, por lo general, suele ser bastante alarmista y se llevan las manos a la cabeza por adelantado". Esto no es óbice, sin embargo, para que la escritora vea de forma positiva que el ministerio se "preocupe y tome conciencia por un problema que puede ocurrir".

Por su parte, Michelle Chevalier, de la Confederación Española de Libreros (CEGAL), concreta que "es cierto que las librerías han perdido dinero en los últimos años, pero no se puede saber si es por la piratería. Está más claro si nos referimos a libros académicos. Ahí sí, pero en los otros sectores, es difícil decirlo".

Curiosamente, ayer también fue el día en el que se hizo público el informe elaborado por el Grupo de Trabajo sobre el Libro Electrónico, del Observatorio de la Lectura y el Libro del Ministerio de Cultura. Este grupo fue creado el pasado mes de septiembre y en él han participado escritores, editores, distribuidores, libreros y expertos del mundo de la edición. Además de los debates se han hecho encuestas sobre el e-book a más de 200 editoriales. Sus conclusiones fueron muy concretas: si bien se observa un aumento de la edición electrónica en un 48,2% con respecto a 2008, hasta superar los 12.000 títulos (lo que supone ya el 11,4% de la producción editorial española). Esto significa que es necesario"readaptar el actual marco legal vinculado al libro electrónico",indica el informe. Nuevas normas y más protección para el autor, que llega la piratería.

Más protección al autor
Entre estas cuestiones, el dossier sostiene el imperativo de "actualizar la legislación relativa a los contratos de edición literaria (...), teniendo en cuenta que la explotación de libros electrónicos bajo contratos preexistentes requiere nueva autorización del autor". Insiste a su vez en "la necesidad de contar con autorización expresa del titular de derecho sobre obras protegidas que se difunden de forma masiva en la red, a través de redes P2P o de páginas web (...) Hay lugar para la vía penal cuando la comercialización masiva de libros electrónicos se realiza con ánimo de lucro".

"Todas estas medidas son de sentido común y, además, ya se hacen. Se están haciendo en papel y lo lógico es que también se hagan en formato electrónico", comentaElena Ramírez, de Seix Barral. La defensa de los derechos de autor es evidente. Las conclusiones de este informe no parecen ser ninguna novedadpara los editores.

Tampoco para los libreros ni los distribuidores. En estas páginas se sostiene que las librerías "deben ser el canal natural de venta de los libros", en el formato que sea. Los distribuidores, por su parte, proponen convertirse en repositorios de contenidos digitales a través de la creación de Distribuidores de Activos Digitales, que pondrían en relación a los editores y las librerías. En vez de utilizar el camión para la distribución de libros, ahora sería la Red.

Precisamente, el informe aplaude que plataformas como la que pondrán en marcha Planeta, Alfaguara y Mondadori el último día del próximo mes de mayo, distribuyan sus libros a partir de lasweb de las librerías y cadenas de librerías.

"No conozco el informe pero creo que está muy bien que se muestre preocupación por los cambios en el mercado. Y no veo nada mal que se intenten proteger los derechos de autor. Está claro que si no se protegen al final salimos perdiendo todos", valora Valeria Ciampi, editora de Alianza.

Ahora bien, como indica Julián Rodríguez, de Periférica, aunque él también ve interesante que el Ministerio haya tomado conciencia ya del e-book, "es importante que tome en cuenta otros factores". No debe ser tan celoso ante una posible gratuidad de los contenidos. "No, porque debe haber una dimensión gratuita para ciertos lectores como los parados, los estudiantes... Si eso ya se está haciendo en otros sectores, no sé por qué no se va a hacer en Internet".

El ministerio ya ha enseñado sus cartas sobre lo que pretende hacer en un futuro. La disposición adicional de la Ley de Economía Sostenible, que posibilitará que la comisión de propiedad intelectual puede decidir cerrar una web, entrará en vigor después del verano. Quieren estar listos porque, según su informe, el 2011 será el verdadero año del e-book. "Más de la mitad del catálogo de todas las editoriales ya estará digitalizado" el año que viene. Eso sí, del precio de los libros electrónicos, el ministerio no indica nada. Y será el próximo gran debate.

lunes, 5 de abril de 2010

Hacen un análisis crítico de "Sobre héroes y tumbas"


Tomado de Revista Ñ
Como es bien sabido, las variaciones del campo intelectual –sobre todo en el ámbito de la universidad y la crítica académica– determinan a su vez variaciones en el valor atribuido a los autores y las obras. Tales cambios, en general, obedecen a cuestiones estéticas, ideológicas y a mutaciones de tipo filosófico –aunque a veces incidan los celos o enfrentamientos personales–, con el resultado de que autores cuya obra, en el momento de su producción, fue valorada desde el punto de vista crítico y ávidamente recibida por el lector común –en el país y el exterior–, al pasar el tiempo y cambiar los protagonistas del mencionado campo, "desaparecen" casi totalmente de la enseñanza y la crítica mainstrean, en una operación de "ninguneo" que, en los últimos años, se ha vuelto bastante característica de diversas empresas que pretenden abarcar la totalidad de nuestra literatura.

En relación con este fenómeno, una de cuyas víctimas ha sido Ernesto Sabato, nada más bienvenido que la excelente edición crítica de su novela Sobre héroes y tumbas en la colección Archivos coordinada por María Rosa Lojo y publicado por Poitiers CNRS con la Dirección General de Asuntos Culturales de la Cancillería. Lojo, además de escritora es especialista en la obra de Sabato, a la que dedicó su tesis doctoral y diversos trabajos. Este análisis significa, tanto desde la perspectiva textual como crítica, una "puesta a punto" de ese texto que tanto impacto tuvo en el campo intelectual argentino –e internacional– desde el momento de su primera edición en 1961. En otro sentido, la novela de Sabato inicia la Nueva Serie de esta colección, que se propone adecuarse a las nuevas realidades del mercado editorial latinoamericano.

La edición es muy cuidada y se debe, en primer término, al tratamiento, equilibrio y acierto con el cual Lojo ha seleccionado a sus colaboradores, ante todo a la encargada de establecer el texto, Norma Carricaburo, quien realiza un trabajo filológico impecable. Logro poco fácil ya que, por un lado, no se conservaron los originales mecanografiados de la novela y, por el otro, a partir de la edición príncipe de 1961 y de la corregida a fondo por el autor en 1966, las sucesivas ediciones incluyeron nuevas correcciones de Sabato, así como arrastraron errores de una a otra. A cambio, se contó con materiales pretextua- les –carpetas correspondientes a las partes de la novela, versiones mecanografiadas de fragmentos de redacción anterior y materiales pretextuales que se publicaron en revistas o periódicos, algunos de los cuales luego se perdieron, o que remiten a momentos previos a la escritura de la novela. Prácticamente todos se publican, sea como Apéndices o como Material pretextual y prerredaccional, lo cual permite un estudio genético del texto, cuyas líneas fundamentales están trazadas por la propia Carricaburo en su "Nota filológica preliminar", labor que se completa con las notas de transcripción de variantes –que la filóloga ha dispuesto con singular inteligencia para no entorpecer la lectura–, las acertadas "Notas explicativas" de tipo lingüístico e histórico y el "Glosario", pensado para lectores no argentinos.
En cuanto a los trabajos críticos seleccionados por Lojo, sus autores son todos estudiosos de la producción de Sabato, cuyas diferentes orientaciones metodológicas determinan que se aborde la obra prácticamente desde todas las perspectivas críticas posibles. Si bien la inclusión de cada uno está ampliamente justificada y constituye un aporte esclarecedor, algunos se destacan. Así, en la sección Historia del texto, las colaboraciones de la fallecida Angela B. Dellepiane, quien basándose en documentación inobjetable desmonta las tendenciosas acusaciones que, en diferentes momentos, se dirigieron contra Sabato y su posición como intelectual y escritor, y la de Enrique Foffani y Miriam Chiani, que releva con admirable amplitud, cuidado y lucidez la recepción de la novela en el campo intelectual del momento. Entre las Lecturas del texto resultan sobre todo interesantes la de Elisa T. Calabrese, quien desde un marco a la vez filosófico y narratológico articula los núcleos de sentido de la novela con la dimensión histórica, la concepción heroica del escritor y el simbolismo gnóstico; la de Fernando Aínsa, que rastrea las antinomias humanas proyectadas por Sabato sobre el contexto argentino y su intento de integración no inmovilista a partir de la novela como visión global del mundo y la de Michèle Soriano quien, enfocando el "Informe sobre ciegos" como núcleo fantástico de la novela, ahonda en la crisis a que aquél somete el realismo de la novela y su función reveladora de los límites del conocimiento racional.
El trabajo de Susana Romano Sued, cuyo planteo teórico de base lacaniana acerca de la relación entre psicoanálisis y literatura es claro y acertado, por desgracia no resulta igualmente productivo desde la perspectiva crítica. En esta revisión de las lecturas críticas es preciso volver a destacar el aporte de Lojo, ya que, si bien no contribuye con una, en el texto "Liminar" y en sus Conclusiones de la "Introducción" subraya con lucidez y concisión aquellos aspectos que hacen de Sobre héroes y tumbas una novela capital de nuestra literatura y de Sabato uno de nuestros grandes autores, mal que les pese a quienes lo quisieran borrar de nuestro panorama literario.